18 mayo 2018

Comida racionada

Presos de canas prematuras paralizados por el toc toc de las pisadas nocturnas del carcelero y que aún podían responder con desfallecimiento a la explosión de su nombre en la puerta de la celda abarrotada. Madres, abuelas, hijas, hermanas viajando con el paquetito de comida que la mayoría de las veces al preso no le daba tiempo de consumir.

La higuera
Ramiro Pinilla

10 mayo 2018

Café sugerente

A veces un café es la invitación para que alguien entre en tu vida.

Cafés Tamazor

07 mayo 2018

Plátano verde

A las ocho y media, una tímida campanilla avisaba a los huéspedes que podían acercarse; las puertas de las cabañas se abrían todas al mismo tiempo y la gente salía descalza, apresurándose con paso glotón. Pero a las ocho y media, el taxi de Clarence, ya la estaba esperando, haciéndole señas; ¡con los atascos, no llegaría a tiempo a la sesión! Y Clarence, corriendo, apenas se atrevía a birlar una tostada o un plátano todavía verde...

El primer siglo después de Béatrice
Amin Maalouf

04 mayo 2018

Bacalao a la brasa

Presté más atención, para ver si hablaban en broma, pero el gesto de los dos hombres era de seriedad. Uno comía bacalao a la brasa y el otro filete con patatas, las dos sugerencias del menú del día. Yo había pedido unos canelones. Cuando llegó el café, el más hablador de los dos confesó que todo aquello venía a cuento de que a su mujer le habían diagnosticado un embarazo psicológico.

Cosas
Juan José Millás

(Edwin Rojas)

02 mayo 2018

Una taza de té frío

Hasta las cinco no llegó ningún signo de vida de su habitación. Entonces hizo sonar la campanilla para llamar al criado y decirle que le preparase un baño frío. No quiso comer y sólo tomó una taza de té frío. Pasó la tarde recostado en el sofá, en aquella habitación a oscuras. Detrás de las paredes frescas resonaba y se fermentaba el verano.

El último encuentro
Sándor Márai