Tenía un cuerpo fibroso y duro, quizás un poco por debajo de su peso ideal para una persona tan alta y con un trabajo tan exigente como el suyo. Su madre meneaba la cabeza cada vez que la veía e intentaba embutir dentro de su estómago cantidades ingentes de pastel de carne y tomates rellenos.
El Paciente, 2014
Juan Gómez-Jurado
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