... pero, enseguida, me apresuré (sería esto, supongo, en San Sebastián) a entrar en una taberna y pedir que me sirvieran un par de huevos fritos con patatas (¡fritos en aceite!) y ¡chorizo! Sentía hambre, y tan patriótico menú debía satisfacer mi apetito tanto como mi nostalgia.
Mi Berlín
Francisco Ayala
(Chicken & Eggs. Consuelo Gamboa)
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