Me acabo de beber la primera copa a tu salud, despacito, mirando al trasluz, entre sorbo y sorbo, cómo suben las burbujas, porque eso es lo importante del champán, que el líquido entre también por los ojos y estalle contra la imaginación. Está riquísimo, tan picante y tan fresco. El champán sin motivo no sabe a nada, ni siquiera es dorado. Pis de gato.
Nubosidad variable
Carmen Martín Gaite
No hay comentarios:
Publicar un comentario